Día 23 Arevalo – Villacastín

Día emotivo de la marcha pues se produjo el encuentro de la marcha noroeste al completo.
Gran madrugón para completar los 26 km de etapa, pues a las 6 de la mañana los caminantes estaban ya en la carretera.
A las doce de la mañana las dos marchas se juntaban a la entrada de Villacastín, lugar de destino y descanso hasta la siguiente jornada.
Los integrantes de la noroeste pasaron departiendo en la plaza hasta la hora de la comida, cuando se trasladaron al parque, lugar del campamento.
Por la tarde siesta y asamblea para compartir experiencias para dar paso a un merecido descanso con más de setenta personas.

Día 22 Arevalo – Adanero

Pequeña etapa por una via de servicio que nos acerca un poco más a Madrid.
La etapa fue corta y transcurrió sin incidentes durante las cuatro horas que duró el trayecto hasta esta pequeña población segoviana.
Poca gente, mucho calor y nada q hacer.
Para dormir nos dejaron el salón de actos de Adanero, donde dormimos para descansar para la siguiente etapa y juntarnos con el resto de compañeros de Salamanca, Ávila y Segovia.

Día 21 Ataquines – Arevalo

El camino a Arevalo fue el más duro de todos los recorridos hasta el momento. Los 17 km que inicialmente eran el recorrido de la etapa se vieron convertidos en 26 por un fallo de coordinación, lo que hizo mella en el ánimo de los caminantes, tanto por los kilómetros de más como por la gran solana que hubo que padecer.
Al llegar a Arevalo la marcha se encontró a un pueblo entregado a sus fiestas y tomo rumbo al polideportivo, cedido por el Ayuntamiento, para comer y dormir la siesta.
Por la tarde la marcha se unió al desfile de carrozas para mostrar al pueblo sus reivindicaciones.
Después cena y a descansar.

Día 20 Medina del Campo – Ataquines

Etapa dura. 17 km por caminos de tierra, piedras y alpacas. Esta jornada fue dura en cuanto a calor y a la dificultad del camino.
A la llegada comida y siesta, para despertarnos con la buena noticia de la incorporación de tres nuevos compañeros.
Para acabar asamblea en la plaza y a dormir, esta vez en el polideportivo cedido por el Ayuntamiento.

Día 19 Medina del Campo

Día de descanso sin descanso en la marcha. A pesar de que no tocaba caminar durante todo el día los caminantes organizaron, difundieron y buscaron contactos para las siguientes etapas.
A última hora de la tarde asamblea en la plaza mayor más grande del Estado donde, a pesar del silencio mediático, se presento un grupo numeroso de gente de donde surgieron nuevas ideas.
De noche reunión por internet con el resto de marchas para concretar la llegada a Madrid y con los compañeros de Ávila para apoyarlos en la manifestación del peaje de la AP-6.

Día 18 Villanueva del Duero – Medina del Campo

24 kilómetros de etapa por Tierra de Campos para llegar a Medina del Campo, lugar del merecido descanso del día siguiente después de más de 300 km.
A la una de la tarde la marcha entraba en destino con el recibimiento y el apoyo de los bomberos. La siguiente parada la oficina del paro, donde los caminantes intercambiaron ideas con los parados de Medina mientras entonaban cánticos propios del momento.
Después de comer un delicioso bocadillo de chorizo, la marcha comenzó a preparar carteles para la asamblea del día siguiente.
Después jornada de descanso.

Día 16 Valladolid – Villanueva del Duero

Después de la gran acogida y el trato en Pucela, la marcha contiúo rumbo a su siguiente destino Villanueva del Duero.
Una treintena de caminantes partió de Valladolid y superó los 23 km sin ningún percance excepto por alguna ampolla de las nuevas incorporaciones.
El recibimiento de los vecinos espectacular, con la cesión del polideportivo para dormir y de las piscinas para darnos un baño.
Por la tarde multitudinaria asamblea en la que intercambiando  ideas con la gente de Villanueva del Duero se apuntó gente a continuar la marcha.
Al final del día a celebrar el cumpleaños de Eva de una manera especial: tarta de torreznos para cenar.

Día 7 La Robla – León

Día de grandes emociones en la marcha con la llegada a León. Tocó madrugar, pues a las once había que estar en León para devolver el apoyo a los mineros en la concentración que tenían en la Junta.
La llegada no supuso ningún problema tanto por la temprana salida como por el gran ritmo de marcha. Durante el trayecto, nuevamente mineros de Pola de Gordón nos ofrecieron asistencia y transporte para los bártulos.
A la llegada a la capital leonesa los caminantes fueron directamente a brindar su apoyo a la protesta donde el edificio de la Junta estaba tomado por los mineros que bien se hacian de notar con pólvora. Al término agradecimiento de los mineros a la marcha con un sincero aplauso.
Después los compañeros del 15M nos ofrecieron compañía y comida en la plaza del Grano, lugar donde se unieron a la marcha caminantes de Galicia y Sevilla.
Una ducha en el albergue de peregrinos y cambio de plaza, esta vez a Botines para hacer asamblea y pasar la noche. En esta plaza, los integrantes de la marcha pudieron intercambiar impresiones e infundirse ánimos mútuos con los mineros encerrados en la Diputación.
Para finalizar un largo día, cena y para la ‘cama’, para descansar y afrontar una nueva etapa ya con un nutrido grupo.

Día 6 Villamanín – La Robla

Sin mayores incidentes transcurrierón los 24 km. de esta etapa con final en La Robla.
La mayor de las sorpresas fue cuando la marcha, a su paso por Pola de Gordón, recibió el apoyo y el avituayamiento de los ex alumnos del Centro Covadonga y de los mineros polesos. Además se ofrecieron a transportarnos los bártulos hasta León. Gracias.
A la llegada a La Robla los caminantes se dirigieron al polideportivo, cedido por el Ayuntamiento, para ducharse, comer y echar una pequeña siesta antes de subir a la plaza para hablar con la gente. Día atípico pues había fútbol.
Cena y a dormir pronto, pues al día siguiente madrugón para estar con los mineros.

Día 5 Campomanes – Villamanín

Llegó el día de la gran etapa, 32 km. para salir de Asturias y entrar en la provincia de León con un gran hito en el camino: el Puertu Payares.

A las seis de la mañana tocó diana para recoger los bártulos e ir a desayunar al restaurante Campomanes, donde nos hicieron e invitaron al desayuno y nos dieron ánimos para el camino. A la salida vinieron también a recibirnos vecinos de Villallana, que nos ofrecieron avituayamiento para la etapa y una aportación económica para este largo viaje. Muchas gracias a tod@s.

El tiempo acompañó y bajo un día nublado los caminantes,que aumentaron en número pues vinieron compañeros de Avilés a hacer la etapa, comenzaron los 20 duros kilómetros hasta llegar a lo alto del puerto. El ascenso transcurrió sin problemas y en tres horas la marcha llegó arriba para hacer una pequeña parada, tomar el último aliento de aire de la tierra y continuar camino a Villamanín, ya en León.

Estos últimos kilómetros transcurrieron tranquilos y llegamos paseando a Villamanín, donde tras un refrigerio, llegamos a las piscinas cedidas por el Ayuntamiento para dormir y organizar la siguiente jornada.

(Lamentamos que esto no vaya más rápido, pero no disponemos de los medios necesarios y se ralentiza un poco hacer este pequeño diario).